Quizás haya sido
sólo una casualidad
es posible
que quien haya soplado este mundo
sea un hombre gordo y con barba
llamando al viento
que tiernamente acaricia tu rostro
mientras duermes.
Quizás haya sido
sólo una casualidad
es posible
que quien haya soplado este mundo
sea un hombre gordo y con barba
llamando al viento
que tiernamente acaricia tu rostro
mientras duermes.
Bonitas imagenes…
me encanta este pensamiento….